viernes, 4 de abril de 2008

Wito

Hola, mi nombre es Wílmer Alirio Velasco Guerrero. Nací el 04 de noviembre de 1981 a las 9:15 de la mañana en la ciudad de San Cristóbal, estado Táchira, Venezuela. Mi infancia la viví en un bello pueblito llamado Cordero, una meseta. Mi mami se llama Ana Edilia Guerrero y mi papi Bernardo José Velasco. soy el menor de 15 hermanos de los cuales 2 ya fallecieron, Alirito el mayor y otra niña... ambos nunca conocí. vivos tengo 9 hermanas y 3 hermanos: Leisfi, Grecia, Ana, Yaneth, Mercedes, Soila, Zully, Pierina y Belkys; George, Onofre y Bernardo... tengo una chorrera de sobrinos los cuales quiero mucho y son un don de Dios para mi, al igual que mis cuñados. La infancia la estudie en el colegio Franciscano María Auxiliadora, en mismo Cordero, es dirigido por monjas Franciscanas del Sagrado Corazón de Jesús. Luego amenacé a mi mamá que si no me cambiaba de colegio no seguiría estudiando y me cambió al colegio Monseñor Acacio Chacón. En esta época conocí a la persona más hermosa, un ángel caído del cielo que me enseñó verdaderamente lo que era el amor se llama Ninoska Isabel Mendez Fernández aunque tuve más novias ella fue la que flechó y aún queda como un recuerdo bonito. Quien no ha conocido el amor humano no puede conocer el amor Divino. Ya en el último año comencé a trabajar en la oficina de mi papá, una distribuidora de gas, allí conocí una monja Salesiana a la cual siempre estaba pendiente, pues su mamita estaba muy grave, y en una de esas conversaciones me dijo que tenia como don del sacerdocio (me reí en su cara y me dijo que si estaba loca). terminado el bachillerato comencé a estudiar lo que para ese entonces me gustaba mucho, administración mención informático en el colegio universitario Monseñor de Talavera. Cuando estaba cursando el segundo semestre me salió matricula para estudiar en el Instituto Universitario de Tecnología Agro-industrial región los Andes, era una opción que no podía desperdiciar. Allí comenzaron los planes de divorcio de mi papás. Me afectó mucho... luego al año mi papá murió... fue un tiempo de recogimiento y comencé a colaborar arduamente en la infancia misionera y la catequesis en la parroquía, eso me llenaba mucho cuando de pronto se me metió el loco y decidí conocer un poco de la vida diocesana pero me equivoqué de teléfono y llamé para donde los Agustinos Recoletos, fue todo una locura... y realicé el proceso y entré con ellos, aprendí demaciado y fueron gratos años de mi existencia pero preferí salir y explorar más allá y conocí a los Capuchinos son lo máximo. De verdad que Dios ha hecho maravillas en mí su nombre es santo y su misericordia va de generación en generación... Esto es un pedacito de mi vida y Dios me ha regalado más que un simple blog para llenar de ella y sé que soy yo el que decido que emoción ponerle a cada una de ellas.

No hay comentarios: